La exportación bielorrusa continúa adaptándose a las condiciones cambiantes del comercio mundial, explorando nuevas rutas logísticas. En 2025, la clave sigue siendo el desarrollo del tránsito hacia China, así como la optimización de las entregas a países de Asia, Oriente medio y África.
Chino como principal socio
En los últimos años, China se ha convertido en uno de los socios comerciales más importantes de Bielorrusia, y las rutas a través de su territorio abren nuevas perspectivas para los exportadores bielorrusos. El aumento del flujo de mercancías a través de los puertos chinos y los corredores terrestres está relacionado con varios factores:
· El desarrollo del proyecto “Un cinturón, una ruta” facilita la simplificación de los procedimientos para las entregas de productos bielorrusos.
· La optimización de las rutas ferroviarias permite acelerar la entrega de mercancías a Asia Sudoriental. En particular, aumenta el número de trenes de contenedores que pasan por Kazajistán en dirección a China.
· La ampliación de las capacidades portuarias en los puertos marítimos chinos permite redistribuir de manera más activa los flujos de transporte.
El desarrollo acelerado de la logística ha permitido a los exportadores bielorrusos reducir los plazos de entrega y los costes de transporte. En 2024 se firmaron nuevos acuerdos con operadores logísticos chinos, lo que permitió a las empresas bielorrusas acceder a capacidades adicionales de almacenamiento y transporte.
Rutas alternativas: a través de Irán y Turquía
Además de China, Bielorrusia está ampliando activamente sus vínculos a través de Irán y Turquía.
· El Corredor internacional de transporte “Norte-Sur”, que pasa por Rusia, Kazajistán, Irán y continúa hacia la India, abre nuevas oportunidades para los exportadores de productos agrícolas y fertilizantes.
· A través de Turquía, los productos bielorrusos pueden llegar tanto a los mercados de Oriente Medio como a Europa, utilizando los puertos del Mar Mediterráneo y del Mar Negro.
Según los expertos_ el desarrollo de las rutas orientales garantizará la estabilidad de las exportaciones bielorrusas y fortalecerá los vínculos comerciales con los socios asiáticos.
Uno de los desafíos a los que se enfrentan los exportadores es la necesidad de adaptarse a los cambiantes regímenes aduaneros, el aumento de los costos de transporte y la necesidad de responder rápidamente a los cambios en la situación mundial.
Sin embargo, los expertos están seguros de que el desarrollo de rutas alternativas garantizará la estabilidad de las exportaciones bielorrusas y ampliará su geografía.
